La combustión se origina de la mezcla de 3 factores: Combustible, aire y una chispa. En ocasiones el combustible puede ser carbono, hidrógeno y azufre. Siempre es necesaria tener una mezcla adecuada de oxígeno y combustible para así poder tener una correcta combustión. Cada partícula de combustible debe tener aire alrededor para lograr la combustión, cuando la combustión es incompleta da como resultado humos y un menor rendimiento del proceso.
Existen quemadores de alta capacidad los cuales operan a altas temperaturas con una llama estable, es decir la temperatura siempre es constante durante todo el proceso de combustión. Debido a su capacidad y estabilidad es posible que con un mismo quemador puedas trabajar dos procesos diferentes y como resultado tendrás mayor eficiencia en tus procesos.
A la hora de elegir un quemador, debes te tomar en cuenta diferentes características. Una recomendación es que sea de acero inoxidable para así lograr un mayor rango de vida del quemador. Lo mejor que puedes hacer es buscar a un asesor al que le puedas decir todas tus necesidades y él te pueda recomendar el mejor quemador para tu proceso e industria. También deberás de comentar qué tipo de combustible ocuparás. Los quemadores pueden usar gas natural, propano o butano.
Así que, si estás próximo a comprar un quemador, asegúrate que la cotización incluya la instalación, pues esto es el primer paso para que tu quemador opere perfectamente.
Comentarios
Publicar un comentario